Consejos de un sabio para vivir bien

Escrito el 05/08/2014 - 10:33am Por Diego Carrasco

CONSEJOS

“Sabiduría ante todo, adquiere sabiduría”. (Proverbios 4.7)

Todos o una gran mayoría de nosotros hemos escuchado o leído alguna vez la historia del gran Rey Salomón, rey del antiguo Israel, que logró reinar cuarenta años y su reinado quedaría situado entre los años 970 y 930 a. C.

Salomón estaba frente a uno de los desafíos quizá más grandes que una persona pueda tener: la de gobernar a toda una nación,…nada más y nada menos!

Cuenta la historia que frente a este enorme desafío, él se sintió tan frágil, tan endeble y tan pequeño, que pidió a Dios que le otorgara sabiduría. En determinado momento, según nos cuenta la historia bíblica, Dios se le aparece a este rey, y le hace la siguiente propuesta: “Pídeme lo que quieras, que yo te lo daré”.

Y la respuesta de Salomón no se hizo esperar: “Dame sabiduría, necesito sabiduría para gobernar bien”. Ahora bien, ¿por qué hago toda esta introducción?

Porque quiero ir metiéndote en la historia, y que a su vez puedas ir situándote de tal manera que logres ver a la sabiduría ya no como algo místico, porque está muy lejos de serlo, sino más bien como algo práctico. Se ha visto a lo largo de los siglos y muchos lo han enseñado así, como que la sabiduría es algo de ciertos “seres especiales”, es para místicos, etc.

Y de acuerdo a lo que vemos en esta historia, nada tiene que ver con eso. Lo cierto es que este hombre fue uno de los más destacados de la historia. Cuando el nombre de Salomón es pronunciado, todos inmediatamente pensamos en sabiduría.

¿Por qué? Porque la Sabiduría era la obsesión y la meta de su vida. Ningún otro ser humano sobre la tierra es recordado por una sabiduría comparable a la de Salomón.

¿Qué es la Sabiduría? El Diccionario de la lengua española la define como: a) Conocimiento profundo que se adquiere a través del estudio o de la experiencia. b) Prudencia, cuidado en el comportamiento y modo  de conducirse en la vida.

Ahora bien, ¿Cómo podemos vivir bien? ¿Qué tiene que ver la sabiduría en todo esto? Presta atención a estos consejos de sabio.

1) El sabio desarrolla una correcta relación con Dios. El vivir bien comienza y depende de una buena relación con Dios. Este rey Salomón escribió canciones y coleccionó proverbios. Los reyes rogaban por una entrevista con él. Construyó un templo que valdría al día de hoy, millones de dólares! Todo en el tiempo justo, usando los recursos apropiados. Todo lo que este hombre sabio alcanzo en su vida fue gracias a que supo seguir al Dios de su padre.

¿Quieres vivir bien? Entonces debes saber que todo comienza a partir de una correcta relación con Dios.

2) El sabio reconoce sus limitaciones personales. “Porque yo soy joven, y no sé como entrar ni salir”. Una de las virtudes que Salomón demostró y que confirmaba que iba por buen camino, era el reconocimiento de sus limitaciones personales.

Vivimos en una sociedad de mucho ego, donde el “Yo lo sé”, “Yo solo puedo”, “No necesito a nadie”, etc abundan, y lo único que hacen es enfermarnos más, porque justamente uno de los propósitos de vivir en sociedad es asociarnos unos a otros, para hacer una mejor sociedad.

¿Puedes reconocer cuáles son tus limitaciones? ¿O eres de aquellos que creen que no necesitan de nada ni de nadie?

3) El sabio desarrolla pasión por sus sueños. “Yo he determinado edificar un templo”. Uno de los sueños de Salomón era construir un templo, algo que su padre David no había podido realizar. Y al hacer esto, Salomón no solo estaba cumpliendo su sueño sino que también cumplía el sueño de su padre de edificar un gran templo. Supo honrar la memoria de su padre.

Tenía claro lo que quería hacer durante su vida, y cuando una persona tiene claro lo que quiere, esa persona jamás pondrá excusas para no hacer lo que debe hacer. Pocas personas saben lo que quieren. La mayoría de las personas nunca persiguen su propia pasión interior, porque no lo tienen en claro.

¿Qué es lo que quieres alcanzar en tu vida? Busca la sabiduría que viene de Dios, abrázala y camina con ella todos los días de tu vida, y verás los resultados.

4) El sabio planifica. “El templo que Salomón edificó tenía veintisiete metros de largo, nueve de ancho, y trece y medio de alto”.

La planificación es, sin duda, uno de los estadios más importantes en el proceso hacia la conquista de sueños y objetivos. Es más, con una buena planificación los resultados son mucho más previsibles y por ende, es un buen augurio para una evaluación satisfactoria.

Planificar es: “Elaborar un plan general, detallado y generalmente de gran amplitud, para la consecución de un fin o una actividad determinados”.

Ser sabios tal como lo fue Salomón es posible solo si logramos desarrollar una correcta y sana relación con Dios. Poder reconocer nuestras limitaciones, apasionarnos por nuestros sueños y elaborar un plan para alcanzarlos hará de nuestra vida una vida de plenitud en Dios. ¿Cuál sería tu respuesta si Dios te preguntara hoy, “qué quieres que te dé? Piensa bien antes de responder.

¡Que tengas un día híper bendecido!

Acerca del autor

Hola, soy Diego Carrasco, vivo en la ciudad de General Roca, Provincia de Río Negro, sur de la Republica Argentina. Pastor de Comunidad de Fé "Más ALTO", Escritor y Conferencista, Acompañante Terapéutico, Profesor de Música y Defensor de la Vida. Casado con Paula y padre de Tomás, Matías, Julieta y Paloma, mis ángeles. Busco constantemente ser una fuente de inspiración para otros.