“Serás mi especial tesoro sobre todos los pueblos”. (Éxodo 19.5)
Siempre sobre la vida de una persona habrá al menos, tres miradas provenientes de diferentes fuentes, y cada mirada desencadenará en tres opiniones diferentes.
Las fuentes de las que provienen esas miradas y opiniones o conceptos son las siguientes: 1) La mirada propia. 2) La mirada de terceros, familiares, amigos, etc. 3) La mirada de Dios.
Y con cada mirada, surge una opinión, es decir, cuando te miras al espejo emites una opinión acerca de tu propia vida, manifiestas lo que te gusta y lo que no, emites palabras que te definen de acuerdo a lo que percibes de tí mismo, esas palabras pueden ser correctas o incorrectas, pero tú las usas para dar una definición de lo que crees que es tu vida.
Cuando tus familiares, amigos, y el entorno que te rodea te observa también emite su opinión de manera correcta o incorrecta, pero también da su veredicto, su sentencia acerca de tu persona.
Por último, cuando Dios te ve también habla acerca de tí y de lo que ve en tí, pero en la opinión de Dios hay una gran diferencia respecto a las dos primeras fuentes. La diferencia radica en que Dios piensa muy distinto acerca de tí, porque básicamente él te mira de manera distinta, ¡porque él te creó, te formó! Y la Biblia dice que cuando Dios vió todo lo que había creado, dijo que era bueno en gran manera, era súper bueno, espectacular!
Y hasta la fecha no he conocido ningún artista que piense mal respecto de sus obras de arte, que piense que son una basura, o que son una porquería. ¡Cuánto más Dios, el Supremo Artista del Universo, pensará bien acerca de tí, que eres su máxima obra de arte!
Tienes que saber que Dios piensa bien de tí, y habla bien de tí, además habla el bien para tu vida, busca solo tu bien, y quiere que te vaya bien en esta aventura de encontrar a tu pareja, esa que te acompañará el resto de tu vida.
El entorno que nos rodea dará su opinión, y nosotros podemos aceptar esa opinión como la definitiva, viviendo de acuerdo a esa opinión. Quizá ellos piensen de tí que no lograrás nunca nada en la vida porque te ven de tal o cual manera, quizá digan que eres un inútil, que no tienes capacidad para lograr los objetivos que tienes por delante, y tú puedes “construir” tu vida sobre esa base.
¡No tienes idea de cuánta gente en este mundo pretende que le vaya bien en sus metas y proyectos, pero que caminan con estas u otras ideas en su interior! ¡No sabes con cuánta frecuencia gente fracasa por haber creído la mentira que alguna vez le dijeron!
Es un grave error pensar que, porque alguien alguna vez te dijo lo que te dijo, es cierto. No importa quien te lo haya dicho, todo lo que te denigre o menoscabe como persona, todo lo que atente contra tus sueños, es una vil mentira, ¡y tienes que rechazar esas palabras! ¿Por qué mentira? Porque nadie más interesado que Dios en que puedas realizarte a lo largo de tu vida. Fuiste creado o creada con un gran propósito!
Si te has apropiado de algo que te fue dicho y que no tiene nada que ver con la verdad de Dios, tienes que romper con esas palabras, o de lo contrario, el fracaso estará asegurado.
La única opinión, y la más importante que tienes que tener en cuenta es la de Dios. Él nunca te dirá algo que te lastime o te haga daño. Él siempre te dirá cuánto te ama, aún a pesar de tus errores, siempre habrá brazos extendidos esperándote para hablar a tu corazón, ¡así es Dios!
Porque cuando él te mira, ve una gran obra de arte, ve un especial tesoro. ¡Que tengas un día híper bendecido!