Este semana la Corte Penal Internacional (CPI), en una asamblea abierta, otorgó a Palestina el estatus de Estado observador no miembro, decisión que abre el camino a que se puedan investigar los crímenes de guerra cometidos en los Territorios Palestinos Ocupados.
La medida que se rige bajo el Estatuto de Roma, tratado bajo el cual funciona ese tribunal que tiene su sede en La Haya, Holanda, le confiera a Palestina la posibilidad de solicitar su ingreso en organizaciones como la FAO, la OMS o la UNESCO y, si sus leyes se lo permiten; puede adherirse al Estatuto de Roma de la CPI.
Riyad Manssur, representante permanente de la Autoridad Palestina ante Naciones Unidas, destacó que este es un primer paso y que en el futuro piensan participar como Estado parte.
“Existe un consenso unánime entre la dirigencia y el pueblo palestino de unirnos a este Tribunal, como un derecho legal que nos asiste y como una decisión civilizada y política para buscar justicia y que se rinda cuenta por los crímenes cometidos contra nuestra gente por Israel como potencia ocupante, y que los responsables de esos crímenes reciban el castigo que merecen”, dijo Manssur.
Palestina comparte el estatus de Estado Observador de ese tribunal con unos veinte Estados que no han firmado el estatuto de Roma, entre los que se incluyen Estados Unidos y Rusia, según nota de prensa publicada en el portal de la ONU.