El terremoto de Ecuador dejó una cifra de fallecidos de 272 personas y dos mil heridos. Registrándose en una magnitud de 7,8 en la escala de Richter afectó el norte de la región costera del país. Personas bajo los escombros difícilmente serán rescatadas a causa que los rescatistas no lograran llegar a tiempo en las zonas afectadas por el sismo.
La catástrofe logró una cantidad de fallecidos que al largo tiempo aumentará el numeró de pérdidas debido que generó daños en la zona del epicentro. El reloj marcó las 18.58 local cuando empezó a temblar en la provincia costeras de Esmeraldas es considerado como “el peor en las últimas tres décadas” conmoviendo estrepitosamente en todo Ecuador. El epicentro se originó en el océano Pacífico a 20 kilómetros de profundidad a 28 de la costa ecuatoriana. Por otra parte, Quito alcanzo 200 replicas en intensidad de 6.1 grados sintiéndose en los próximos tres días.
“Se trata de uno de los peores terremotos que ha sufrido América Latina en la última década, después del que en 2007 golpeó a Perú (casi 600 muertos) y en 2010 a Chile (más de 150 fallecidos) y la catástrofe de Haití de ese mismo año, con más de 300.000 muertos”. Reseñó el diario El País.
Los pobladores de Manta, Portoviejo, Pedernales y otras zonas afectadas lograron refugiarse, el movimiento telúrico causó 60 réplicas con magnitudes de 2,6 y 5,6 según el instituto Geofísico. El vicepresidente, Jorge Glas afirmó “se ha declarado en emergencia las provincias de Santa Elena, Manabí, Esmeraldas, Guayas, Santo Domingo de los Tsáchilas y Los Ríos”. Aseguró.
“Los daños son graves y tenemos decenas de muertos”, auguró el presidente Correa. El sábado resulto uno de los peores días de Ecuador se estaba contando 77 muertos. Multiplicado por tres cifras. Sacudida fuertemente por el sismo la costa turística es considerada como “el corazón turístico nacional e internacional del país” fue golpeada hasta lograrse la destrucción de los lugares más pobres. Pedernales quedó totalmente descomunicada mientras pedían ayuda ante el desplomé de la infraestructura de casas y edificios en toda la ciudad.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, manifestó: “Nuestra Unidad de Asuntos Comunitarios ya está en el terreno trabajando con las organizaciones y líderes comunitarios para canalizar mejor cualquier ayuda que podamos ofrecer, mientras los ecuatorianos priorizan esfuerzos de rescate y empiezan a reconstruir sus ciudades”, reseñó el diario El Universal.