Enemigo cansancio

Escrito el 22/04/2014 - 10:46pm Por Diego Carrasco

CANSANCIO 2

“Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó diciendo: Levántate y come, porque largo camino te resta”. (1º Reyes 19.7)

Un mensaje intimidatorio de parte de Jezabel destinado a Elías, el profeta del fuego, hace que este tome la decisión de huir por un camino desierto.

Elías siente que su vida corre peligro, una amenaza de muerte y la sensación de tener las horas contadas generan en este hombre de Dios algo nunca antes experimentado. El profeta que ayer experimentaba una de las más grandes victorias de su vida, ahora estaba sumido en el miedo y la incertidumbre, llenos de pensamientos y dudas sin explicación.

A diario se repiten escenas como esta, donde miles son fuertemente aturdidos por mensajes que vienen y amenazan con terminar con lo que se ha construido hasta hoy. Pero no podemos ignorar lo que produce otro factor que está involucrado en esta historia: el cansancio.

Recordemos que Elías venía de matar y cortar las cabezas de 450 profetas de Baal, y eso físicamente, emocional y espiritualmente le produjo un gran desgaste. Pues bien, de eso quiero hablar en esta ocasión, y compartirles algunas enseñanzas.

1) En primer lugar, si estás atravesando un período de mucho cansancio, lo que tienes que hacer es simple y sencillamente DESCANSAR. Elías estuvo huyendo a lo largo de todo un día, esa caminata (o tal vez corrida) sumado a lo que significó degollar 450 profetas, le significaron a este hombre un gran desgaste energético, entonces lo que necesitaba hacer para reponer energías, era dormir y comer bien.

Por esa razón, el ángel de Jehová le dice: `Levántate y come´. Anteriormente, había sucedido lo mismo, el ángel le había dicho exactamente lo mismo: ` Levántate y come ´. Luego de hacerlo, Elías volvió a quedarse dormido. Si estás atravesando períodos de cansancio, tómate un tiempo para descansar, repón energías y luego vuelve a tus tareas, no antes!

2) Nunca tomes decisiones estando cansado. Un presidente de Estados Unidos dijo lo siguiente: `Nunca firmo documentos después de las 17 horas, pues estoy muy cansado para pensar con cordura´.  El cansancio hace que las montañas sean mucho más altas de lo que en realidad son, los valles son más profundos, el cansancio nos torna irritables, perdemos la paciencia con facilidad y somos duros con la gente que amamos.

No hay nada más peligroso que un hombre cansado, una mujer cansada, nada más peligroso que un líder cansado. Puede actuar con suma crueldad sin que sea cruel en sí mismo, probablemente tome malas decisiones, etc. Si debes decidir algo y estás muy cansado, posterga esa decisión, no apures nada o te arrepentirás de lo que venga.

3) El cansancio te vuelve inactivo. Mientras Elías estuvo atravesando ese período de cansancio, no tenía ganas ni la motivación suficiente para hacer nada. Lo único que quería era morirse. El cansancio es un enemigo que aborta tu acción, te deja inmóvil, te paraliza, etc.

Se va perdiendo la objetividad, no podemos ver con claridad lo que es correcto. Nos tornamos insensibles al pecado cuando estamos cansados. Por esa razón y otras tantas, necesitamos entender que el cansancio es mucho más que un estado físico, se puede tornar en uno de los peores enemigos de nuestra vida si no logramos entender lo que este significa.

`Come y duerme ´puede ser una respuesta simplista si así lo quieres ver, pero hay algo muy profundo en ella. En momentos de agotamiento extremo, lo único que necesitamos hacer es descansar. Nada más importante que eso.  Recuerda esto: el descanso es una gran inversión para tu mañana, en cambio el cansancio te generará pérdidas excesivas. No lo olvides!

Que tengas un día híper bendecido!

Acerca del autor

Hola, soy Diego Carrasco, vivo en la ciudad de General Roca, Provincia de Río Negro, sur de la Republica Argentina. Pastor de Comunidad de Fé "Más ALTO", Escritor y Conferencista, Acompañante Terapéutico, Profesor de Música y Defensor de la Vida. Casado con Paula y padre de Tomás, Matías, Julieta y Paloma, mis ángeles. Busco constantemente ser una fuente de inspiración para otros.