Después de tantos conflictos el gobierno interino de Egipto, entre hoy y mañana, han invitado a sus habitantes a las urnas de votación para escoger lo que será su nueva Constitución ante un nuevo regimen que tomó el poder a la fuerza en medio de protestas el año pasado; derrocando a su entonces presidente Mohamed Mursi.
Aunque fue en el año 2012 que el gobierno de Mursi había aprobado y puesto en orden legítimo una nueva Constitución aprobada con un 64% de los votos, pero con una participación de tan sólo un 33% y en medio de violentas manifestaciones. Esta se suspende ante la llegada al poder del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, con Mohamed Hussein Tantawi, Ministro de Defensa al frente.
Ante la salida del depuesto Mursi, miles de sus seguidores intensificaron sus protestas con grupos islamistas extremistas, afectando aun a los mismos creyentes de otras tantas religiones qu no fueran del islam. Adversando así a catolicos, cristianos, cotos y evangelicos.
Sin embargo, de llegarse aprobar la nueva Constitución, Egipto daría un gran salto con relación a libertades religiosas, ya que contempla garantizar la total libertad religiosa en el país. Aunque no dejará de ser un Estado islamico, motivo por el cual han veniddo luchando muchas organizaciones. Para ello, mañana tendremos el resultado final de tantos años de luchas y vidas perdidas por una misma causa.
