Planes vigentes

Escrito el 26/11/2013 - 10:37pm Por Diego Carrasco

PLAN 1

“Y el cabello de su cabeza comenzó a crecer, después que fue rapado” – (Jueces 16.22)

Hay historias o acontecimientos que de no haber quedado registrados en la Biblia, seguramente no nos llamarían demasiado la atención.

Sansón era un hombre común y corriente, como cualquiera de los que podemos llegar a encontrar a nuestro alrededor, excepto por una razón: estaba dotado de una gran capacidad divina, semiescondida, semioculta de manera milagrosa en su cabello.

Sansón es el fruto de un milagro de Dios sobre la vida de una mujer estéril, imposibilitada de poder concebir,…hasta que Dios entra en acción, y cambia la maldición en bendición.

Entre todo lo que Dios habla respecto de Sansón, figura lo siguiente: “…y navaja no pasará sobre su cabeza, porque el niño será nazareo a Dios desde su nacimiento…”

El nazareato era un pacto que Dios establecía con una persona, y la señal de ese pacto era que la persona no debía cortarse el pelo. Era una señal visible de que existía un vínculo especial entre Dios y esa persona.

Ahora bien, en determinado momento de su vida, Sansón empieza a tener en poco ese pacto. Comienza a moverse como menospreciando la palabra que había sido dada sobre su vida, y es ahí cuando comete una serie de errores de los que nosotros debemos aprender para no caer en ellos. Veamos.

1) Sansón se enamora de una mujer que estaba más interesada en lo que él tenia, en su gran capacidad, que en lo que él era. Nunca entregues tu corazón a quien está más interesado o interesada en lo que tienes que en lo que realmente eres.

2) Comenzó a frecuentar lugares no aconsejados en busca de una mujer. No busques pareja fuera del pueblo de Dios, no conviene. Esto es algo archisabido, pero muy poco practicado o puesto por obra. Hacerlo te llevará a grandes frustraciones.

3) No utilices lo que Dios te ha dado para impresionar a los hombres, o hacer alarde delante de nadie. Utiliza lo que se te entregó para bendecir a otros.

4) Sin Dios en tu vida, estás perdido. Sansón no pudo hacer frente a sus enemigos sin la presencia de Dios sobre él.

5) Aquellas debilidades que no sean tratadas delante de Dios pueden llevarnos a la ruina. Sansón perdió sus ojos primero, luego su vida, a causa de una debilidad sexual.

6) Debemos recordar que el pecado y la desobediencia nos alejan de Dios. Después que el cabello de Sansón fue cortado, él se sintió débil, sin fuerzas, y no pudo ver que Dios se había alejado de su vida.

Ahora bien, al seguir el relato notamos algo “normal”. Dice el texto que el cabello, después que fue cortado,…comenzó a crecer nuevamente! Y esa es la gran noticia que quiero compartirte en este día. Debes (y debemos saber) que aún cuando nos equivoquemos y perdamos de vista la palabra dada a nuestra vida, e invalidemos con nuestras decisiones y acciones el pacto de bendición que fue establecido sobre nuestra vida, Dios no nos deja de lado, ni cancela sus planes previamente establecidos para nosotros. Esto no significa que tengamos licencia para hacer lo que nos de la gana. Es más bien, un llamado a la responsabilidad y a actuar con sabiduría.

No hay error, pecado o cosa que hayas cometido, o cometas, que haga que Dios cancele sus planes previamente establecidos. Por eso hoy, al igual que el salmista hace miles de años, podemos decir: “Jehová cumplirá su propósito en mi vida”.

Sientes que le has fallado a Dios? Sientes que has tomado malas decisiones? Arregla la situación con Dios, y camina hacia tu destino de bendición, porque Dios ha determinado algo sobre tu vida, y no hay error o pecado que pueda cancelar los planes de Dios. Sus planes siguen vigentes. Que tengas un día híper bendecido!

Acerca del autor

Hola, soy Diego Carrasco, vivo en la ciudad de General Roca, Provincia de Río Negro, sur de la Republica Argentina. Pastor de Comunidad de Fé "Más ALTO", Escritor y Conferencista, Acompañante Terapéutico, Profesor de Música y Defensor de la Vida. Casado con Paula y padre de Tomás, Matías, Julieta y Paloma, mis ángeles. Busco constantemente ser una fuente de inspiración para otros.