La Importancia de la Bendición

Escrito el 10/04/2018 - 8:43pm Por Diego Carrasco

BENDICION

Y guisó Jacob un potaje; y volviendo Esaú del campo, cansado, dijo a Jacob: Te ruego que me des a comer de ese guiso rojo, pues estoy muy cansado. Por tanto fue llamado su nombre Edom. Y Jacob respondió: Véndeme en este día tu primogenitura. Entonces dijo Esaú: He aquí yo me voy a morir; ¿para qué, pues, me servirá la primogenitura? Y dijo Jacob: Júramelo en este día. Y él le juró, y vendió a Jacob su primogenitura. Entonces Jacob dio a Esaú pan y del guisado de las lentejas; y él comió y bebió, y se levantó y se fue. Así menospreció Esaú la primogenitura. Génesis 25. 29 al 34 –

Es en el hogar donde debemos tomar conciencia sobre lo que implica y significa la Bendición de Dios, y esa es tarea de los padres. Esaú y Jacob, hermanos gemelos, crecieron en el mismo hogar y con los mismos padres, pero con perspectivas muy diferentes respecto a los tesoros y privilegios celestiales.

Primogenitura: el primogénito heredaba el doble de lo que dejaba el Padre, heredaba el liderazgo de toda la familia o clan, y recibía el privilegio “sacerdotal” ante Dios por toda la familia (es decir, presentaría los sacrificios, ofrendas y oraciones a Jehová Dios)…

Podemos identificar la indiferencia en el corazón de Esaú por los favores de Dios, cuando dice: a) “¿para qué me servirá la primogenitura?”. Pensamientos incorrectos nos llevan a decisiones incorrectas. b) “comió, bebió, se levantó y se fue”. Indiferencia hacia la bendición.

Cuando no enseñamos a nuestros hijos a valorar lo que Dios les ha dado, generamos hijos irresponsables, indiferentes espiritualmente hablando, y que terminarán lejos del Señor. Si no les enseñamos a poner en primer lugar a Dios, no solo con las palabras sino con el ejemplo, lo más probable es que tampoco ellos lo tengan como prioridad.

Necesitamos como Papás tomar la posta y atrevernos a proferir bendiciones sobre nuestros hijos, Dios ha soltado algo especial sobre cada uno de ellos, ha establecido y profetizado lo que ha de ocurrir con cada uno, pero como padres debemos alinearnos a lo que Dios ha establecido y declararlo una vez más.

Lo más importante que puedes/debes tener, cuidar y apreciar es la Bendición de Dios sobre tu vida, tu familia, y todo lo que haces.

2) Desarrolla temor a Dios en tu corazón, y enséñalo también…

En el N.T. Esaú es llamado profano (Hebreos 12:16). El término hebreo para profanar se traduce como: “irreverencia, pisotear, vulgar”. Esaú no valoró lo que el Señor le estaba entregando.

Cuando no entendemos lo que significa tener u obtener la bendición de Dios sobre nuestra vida, es cuando la subestimamos, la menospreciamos, no le damos la importancia espiritual y/o real que tiene, y por lo tanto, generamos que dé lo mismo un plato de lentejas (cosas terrenales y valores terrenales) que la primogenitura (favores del cielo).

Los hijos eran buenos en aquello que hacían, pero no fueron buenos en buscar a Dios, y desarrollar temor por la presencia de Dios. Aquellos valores que aceptemos en nuestra vida determinarán lo que sea prioridad para nosotros y para los nuestros.

Si para nosotros la mentira es un valor por sobre la verdad, no te sorprendas que te mientan y que vivas mintiendo. Si la mezquindad y avaricia son valores que abrazas no te sorprendas que los demás sean mezquinos y avaros contigo.

Si abrazas la presencia de Dios en tu corazón, si desarrollas temor de Dios en tu vida, todo tu entorno, tu familia y hogar será profundamente bendecido.

Termino con esto. Necesitamos re – descubrir en este tiempo el valor y el poder que la bendición de Dios tiene sobre nuestra vida, no la subestimes, no la descuides, no la menosprecies. Te bendigo…

Acerca del autor

Hola, soy Diego Carrasco, vivo en la ciudad de General Roca, Provincia de Río Negro, sur de la Republica Argentina. Pastor de Comunidad de Fé "Más ALTO", Escritor y Conferencista, Acompañante Terapéutico, Profesor de Música y Defensor de la Vida. Casado con Paula y padre de Tomás, Matías, Julieta y Paloma, mis ángeles. Busco constantemente ser una fuente de inspiración para otros.