Otro nuevo año

Escrito el 08/01/2018 - 3:07pm Por Carlos Hernández Zamora

Parece que fue ayer cuando estaba al frente de mi ordenador, escribiendo un artículo de bienvenida del año nuevo. Los días van pasando tan rápidamente que ya estamos comenzando otro. Las festividades tradicionales de navidad  han terminado y de ahora en adelante volvemos a la realidad.

Son muchos los mensajes que se publican en las redes sociales sobre los consejos para tener un nuevo año, desde aquellos que recomiendan comerse las 12 uvas y sacar maletas para presagiar un año de abundancia y de viajes respectivamente hasta los más inusuales. La verdad es que el hombre siempre ha tratado de condicionar el futuro conforme a una visión mítica  y tradicional. Todos buscamos las respuestas en el porvenir, nos gustaría viajar por el tiempo y averiguar que pasará tal fecha, pero a no ser por las películas que nos presentan individuos que viajan por el tiempo, no tendríamos  una idea de cómo supuestamente es ese fenómeno, pero la realidad es que es un misterio. Sólo es potestad divina conocer el futuro. 

¿Cómo será este año, nos preguntamos? Y la pura verdad es que únicamente podemos pedir instrucciones a Dios para vivir con sabiduría. En el Salmo 90 «Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría» se encuentra la oración de un anciano que pide orientación divina para saber vivir la vida. El tiempo de nuestra partida está estipulado en el libro de los vivientes, pero lo más importante es que el tiempo que Dios nos ha señalado para vivir, logremos hacerlo de una manera positiva y provechosa.

Dios no quiere que la humanidad se preocupe por el futuro, Él tiene un futuro asegurado para cada uno de nosotros. El planeta tierra está sufriendo con muchos cataclismos como el calentamiento global, la contaminación ambiental, las severas tormentas de nieve, los huracanes, terremotos  y los problemas sociales que se gestan en todos los países.

La Biblia nos habla de un año agradable: 4:18-19:« El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos, a pregonar el año del favor del Señor».  Dios tiene una serie de bendiciones en tu vida. Si lees Jeremías 29:11: «porque yo se los planes que tengo para vosotros, dice el Señor, planes de bienestar y no de calamidad para daros un futuro y una esperanza». Encontrarás que hay un plan específico para la prosperidad. Él tiene un plan, Él es ordenado y sistemático, tiene una particularidad de sus atributos que se manifiestan en su soberanía.  Dentro de ese plan, está ordenar tu vida, si estás hecho pedazos y no encuentras una senda, un camino para salir de esa maraña, Jesucristo está dispuesto a libertarte  para que tengas un nuevo comienzo.

No te llenes de frustraciones, porque a la larga, solo servirán para aumentar tu complejo de inferioridad, y estarás atrapado en la oscuridad, no podrás ver los días soleados y bendecidos que Dios ha preparado para ti. Hay una recomendación muy especial: Hechos 3:19: « arrepentirse y convertirse para que vengan de la presencia del Señor, tiempos de refrigerio». Esa palabras me gusta tanto, el refrigerio, es como un oasis, si, cuando la sequía de tu vida, te está marchitando y comienzas a beber del agua de la vida eterna, renaces, eres como una hierba que en tiempo de verano, está para ser quemada, pero cuando el río de Dios riega tu vida, tu verdor aparece y te sientes como un árbol plantado junto a corrientes de agua.

¡Qué bendición es volver a empezar! No importa cuántas veces te has alejado del camino, quizás te hayas perdido y tu brújula espiritual está inactiva, pero cuando menos recuerdas, te llega la oportunidad de renovar tus fuerzas espirituales y quieres nuevamente caminar con Dios.

¡Cuántas bendiciones están esperando por ti! La armonía familiar, sí, hay un plan específico para restaurar ese hogar que el Creador te ha dado. Basta de peleas, malos entendidos, malos tratos, hay una paz en medio de la tormenta. Quizás estás enfermo y esa enfermedad te tiene esclavizado con un espíritu de amargura y de muerte, a ti te digo que te levantes, Dios es especialista en hacer que los huesos secos vuelvan a regenerarse. Él ha traído sanidad para tu vida en todos los aspectos. Si estás sin trabajo, te llenará de ideas para que salgas de esa situación. No te digo que no tendrás problemas, si los habrá, fáciles o difíciles de resolver, pero siempre habrá un salida.

En este año nuevo, libérate de todo tipo de opresión y empieza a levantarte. Esfuérzate y se valiente. Hay muchas bendiciones esperando por ti.

¡Qué la gracia de Dios sea contigo!

Acerca del autor

Educador de generaciones, orientado al estudio de la literatura y lenguas extranjeras. Me agrada escribir cuentos y ensayos. Creo en las capacidades de las personas para salir adelante. Analítico en las problemáticas sociales. Constante en el estudio, pues sé que un pueblo educado es un ente libre de la ignorancia. Aficionado a la tecnología, lector activo y participativo de la Biblia. Bloguero de Onda Exclusiva en la sección de «vida cristiana» y «acción social».