La vida nos cambio a todos en el 2020, a todos. Aunque es cierto que cada año trae sus altas y bajas, el 2020 ha sido único porque fue el que nos ha tocado vivir con una pandemia a nivel mundial. En medio de un tumulto de vivencias, he reflexionado sobre la fragilidad de la vida y a continuación te traigo 20 cosas que el 2020 me ha enseñado y que espero que tú también lo hayas recapacitado:
El cuidado personal es una prioridad, no un privilegio.Hubo varias ocasiones en este año en el que había tantas exigencias a las que tuvimos que atender, que tuvimos que hacer una pausa y dejar todas esas ocupaciones para descansar y salir de ese ambiente para cuidarnos a nosotros mismos. Cuidar de ti mismo debe ser tu prioridad antes que lo demás.
La vida no espera a nadie.El virus no hizo excepciones ni esperó a nadie, primero se pensaba que cierto grupo de personas podrían ser afectadas, pero esto fue para todos y en todas partes y sin importar estatus económico, edad, religión, etc. No pienses que la vida te va a tratar diferente a ti por quien eres, así no funciona. Aprovecha bien el tiempo porque la vida no te va a esperar.
Sé intencional con todo lo que hagas. Tu futuro depende de ello.No puedes hacer las cosas como quieras o para ver qué sale o cómo te va. Salir de casa este año implicaba tener cada movimiento fríamente calculado porque si te salías del plan, podría afectar tu futuro, y así sucedió con muchos.
Solo tenemos el presente.Al final, todos los planes, metas y objetivos que teníamos para este año se vieron afectados y el presente fue lo único con lo que nos quedamos. Aún cuando los planes se vean afectados, asegúrate de disfrutar el presente porque este no volverá más y es el único en el que podemos hacer algo al respecto.
Acepta el dolor y dolerá menos.
Si se trató de perder privilegios, oportunidades, el trabajo u otras cosas más, no puedes quedarte lamentándote lo que has perdido o lo que ya no tienes. Si es cierto que ha sido difícil porque no es lo que querías, pero aceptarlo con dolor es mejor que hundirte o quedarte estancado en el lamento, pues dolerá menos.
La felicidad la creas tú. No busques la felicidad afuera.En varias ocasiones pensamos que necesitábamos ir al cine, a los restaurantes o salir con otra gente en lugares públicos para ser felices, y aunque son actividades recreativas, nada de eso rige tu felicidad. Tú puedes ser feliz desde casa y contigo mismo porque la felicidad comienza desde adentro y no de afuera.
Algunas veces las personas no quieren ser salvadas.Hubo, hay y habrá gente falta de cerebro porque por más que vean lo importante que es usar protección personal, se han negado a usarlo. Es una lastima, pero estás personas existen y lo hemos visto ahora con la pandemia. El problema es que la pandemia solo resaltó quiénes no se aman y no quieren salvarse. No pierdas tiempo con aquellos que no se aman, son necios y no quieren salvarse, en general.
Nada se queda para siempre.El cambio es inevitable. Siempre pensamos que todo estará ahí por siempre como el trabajo, los lugares y hasta los amigos, pero todo eso cambió y ha sido inevitable tener control sobre ello. Nunca des por sentado que esto y más será eterno.
La soledad no es estar solo. Disfruta tu propia compañía.Si no puedes ser feliz contigo mismo en donde estás, entonces no haz aprendido la diferencia entre la soledad y estar solo. Tú puedes encontrarte y disfrutarte a ti mismo y te darás cuenta qué hay varias facetas de tu vida que puedes disfrutar.
Todos peleamos una batalla que no conoces. No juzgues, sé amable.A veces pareciera que en la vida somos los únicos con problemas, pero así como la pandemia nos mostró que todos teníamos el mismo problema en diferentes niveles, cada uno peleamos una batalla en la vida y debemos empatizar con todos, sin juzgar la batalla que cada uno está peleando.
Tu escoges todo lo que hagas. Tus decisiones afectan tu destino.Muchos se infectaron con el virus porque escogieron relacionarse y hacer actividades no recomendadas. Sin importar el virus, todas tus decisiones tendrán consecuencias y afectarán tu destino. Asegúrate de tomar buenas decisiones en todo lo que hagas.
No tomes nada a la ligera. Sé agradecido con lo que tienes.Cada pertenencia y cada cosa tiene un valor que no debes desaprovechar ni devaluar. Agradece por lo que tienes, aun sea poco o insignificante para ti, aprécialo y no lo tomes a la ligera.
Las acciones hablan más que las palabras.Cuando las personas empezaron a ayudar a los necesitados en esta pandemia, esas acciones salieron a la luz y fue lo que más impacto tuvo. Si puedes hacer algo por el prójimo, hazlo hoy. Habla menos y haz más, y hazlo de corazón, no por interés o atención.
Los estudios y educación son importantes, nunca dejes de aprender.Si te diste cuenta, los deportes, el entretenimiento y los YouTubers no sacaron al mundo adelante en esta pandemia, fueron los doctores, científicos, educadores, etc. La educación es importante y seguir aprendiendo es importante. Sigue estudiando y persiste en ello.
El miedo te puede matar solo si te rindes ante el.Si es cierto que el coronavirus fue inesperado y atemorizante, pero lo importante es no dejarse matar por el miedo. Si vives con miedo y cedes ante el, paralizas tu vida y entonces dejas de vivir. Está bien tenerle temor al coronavirus pues eso te mantiene alerta, tenerle miedo es otra cosa.
Dile a las personas que amas cuanto las amas y cuanto te importan con más frecuencia.Quizá les dices que las amas a las personas que aprecias, pero hazlo con más frecuencia porque nunca sabes cuándo llegará una situación que te cambie la vida y abstendrá de hacerlo, como el coronavirus. No esperes a que llegue un virus para expresar tu cariño y afecto, comienza hoy desde donde estás y con quien estás.
El que se aburrió en la pandemia, no tuvo disciplina.Nunca entenderé por qué hubo y hay personas que se aburrieron de estar en casa pues hubo un sin fin de ocasiones para crecer en habilidades, conocimiento, oportunidades y más. Ya sea que tuviste más tiempo libre o estuviste más tiempo en casa, la forma como utilizaste ese tiempo se refleja en qué tan disciplinado eres. La disciplina es esencial para una vida exitosa.
La salud financiera es importante, el conocimiento financiero te va a salvar.
Ahora que muchos han quedado sin trabajo, con sueldos reducidos o con entradas de dinero limitadas, fueron los ahorros los que sacaron a todos adelante. Ser sano financieramente es importante porque te ayuda en los momentos de crisis, asegúrate de vivir sabiamente económicamente. El dinero que ahorras hoy te salvará mañana.
El compromiso se revela en los tiempos de crisis.
Cuando todo va bien en la vida, todo parece espectacular, pero es en los tiempos de crisis donde se forja el carácter y se revela tu compromiso. La pandemia solo sacó a la luz el valor e importancia del compromiso en las personas, por eso es que muchos se vieron afectados en sus relaciones matrimoniales, familiares o inclusive con Dios, porque desde el principio no hubo un compromiso total. Esta pandemia solo sacó a la luz los que no estaban comprometidos completamente. Tu vida debe ser un compromiso continuo en todas las áreas.
Solo Dios sabe qué pasa y que va a pasar, por lo tanto aférrate a Él.
Ni los científicos, ni los doctores ni los medios de comunicación—nadie—sabía que pasaría, y hasta el momento nadie sabe qué va a pasar con el coronavirus. El único que sabe qué sucederá es Dios porque todo es gobernado y controlado por él. «¡Dios mío, a ti te pertenecen la grandeza y el poder, la gloria, el dominio y la majestad! Porque todo lo que existe es tuyo. ¡Tú reinas sobre todo el mundo!» (1 Crónicas 29:11)
Ya sea que hayas vivido esto por ti mismo o lo hayas visto reflejado en la vida de otras personas a tu alrededor, es importante recordar estas lecciones y apropiarlas a tu vida. Espero que en este 2020 hayas reflexionado, para cambiar estilos de vida, hábitos y costumbres por nuevas formas de ver la vida. No permitas que se acabe el año y continúes con tu antigua forma de ver y vivir la vida. Usa estas enseñanzas hoy, para vivir mejor no solo en las próximas semanas o meses, sino el resto de tu vida.
¿y tú con cuál enseñanza te identificaste más? Cuéntanos abajo en un comentario.