Una nueva Navidad

Escrito el 21/12/2018 - 3:20pm Por Carlos Hernández Zamora

En medio de todos los problemas y dificultades que el mundo pasa, siempre hay un espacio para pensar en la Navidad, para recordar los tiempos pasados cuando éramos niños y vivir de nuevo la ilusión de soñar. Época tan especial cuando al compás de la música despertaban un sentimiento de paz y hermandad en las familias. Cantar los villancicos y participar en la cena navideña era una costumbre inmediata así como  compartir los alimentos  con amigos y vecinos.

Recordar aquellos tiempos en los que el nacimiento  de Jesús se mezclaba con aquella sensación  de alegría y la ignorancia por esperar un juguete que por sencillo que fuera tenía un gran valor sentimental. Épocas aquellas que han quedado guardados en el cofre del recuerdo, llenos del polvoriento y efímero pasado.

Mirar las estrellas y buscar en ellas la que más brillaba, para pensar que ese astro representaba la estrella de  Belén. Tiempos aquellos donde no había internet ni televisión las 24 horas del día y que comprábamos un arbolito  que lo pintábamos de plateado o blanco hasta decorarlo con adornos y luces.

Todo eso tenía un sentimiento muy contagioso que despertaba un deseo de estar cerca de Dios, de llenarse de todo lo bueno de la vida y contagiar a otros con un espíritu de hermandad.

Navidad en el siglo 21, llena de ambientes tecnológicos mezclados con el ausentismo familiar debido a la migración, fenómeno muy común en los pueblos centroamericanos y de otros países del mundo, cuadros de violencia y desnutrición, desempleo y enfermedad. En medio de todo esto, el poder de Dios se manifiesta en la humanidad, pues hay una respuesta eficaz que se nutre de muchas alternativas y soluciones.

 Romanos 12:02  recomienda que: «No os conforméis a este siglo, sino transformados por medio de la renovación de nuestra mente» se presenta como un reto constante para buscar siempre la novedad mental. Si  nuestro pensamiento no se dinamiza hacia lo nuevo de una forma positiva, nos quedamos atrapados en aquellos esquemas o patrones de conducta que nos impiden progresar en las esferas de la personalidad del individuo.

No cabe duda que hemos perdido el verdadero concepto de la Navidad, lo hemos mezclado con el consumismo y el propósito de Dios ha quedado por fuera. Se celebra la fiesta de un cumpleañero pero se le deja  afuera.

El nacimiento de Jesús era un plan elaborado cuidadosamente en la mente de Dios para proveer un medio de salvación a la humanidad. El pecado sentenciaba la muerte eterna, pero era necesario el sacrificio de un cordero sin mancha, para con cuya sangre, toda la humanidad fuera salva.

El regalo de la Navidad está ahí, al alcance de la humanidad: Isaías 55:1«Todos los sedientos, venid a las aguas, y los que no tenéis dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad vino y leche sin dinero y sin costo alguno» Es una atracción cuando vamos a las tiendas a buscar ofertas y aunque no tengamos necesidad, debido a la sugestión publicitaria compramos cosas innecesarias, sin embargo el ofrecimiento de Dios tiene una garantía eterna en una oferta para darnos vida eterna.

Las indicaciones precisas, las de buscar a Dios, mientras pueda ser hallado y llamadle en tanto está cerca, deje el impío su camino y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase al Señor, que tendrá de él compasión, al Dios nuestro, que será amplio en perdonar. Isaías 55:6-7

En esta navidad recibe el mejor regalo, deja que Jesucristo llene tu vida de paz y amor.

Lucas 2:14 «Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él se complace. »

¡Feliz Navidad! ¡Qué Dios siga bendiciendo tu vida!

Acerca del autor

Educador de generaciones, orientado al estudio de la literatura y lenguas extranjeras. Me agrada escribir cuentos y ensayos. Creo en las capacidades de las personas para salir adelante. Analítico en las problemáticas sociales. Constante en el estudio, pues sé que un pueblo educado es un ente libre de la ignorancia. Aficionado a la tecnología, lector activo y participativo de la Biblia. Bloguero de Onda Exclusiva en la sección de «vida cristiana» y «acción social».